Nos gustan los rojos explosivos, los rubios platinos, los castaños chocolate, los negros intensos… Pero sabemos (por experiencia) que no todos nos quedan igual de bien. Acertar en la elección del color de cabello que más va contigo es uno de los grandes retos para todas las mujeres. Te damos una pequeña guía para que conozcas cuál es el que mejor se puede adaptar a ti.
El color ideal para teñir tu cabello depende en gran medida de tu fenotipo, es decir, del color de tu piel y tus ojos. El color real de tu piel es el puedes ver en la parte interior de tus muñecas, ya que esa zona no está tan sometida a los efectos del sol como la cara, el escote o los hombros, y en ella se contempla a la perfección el tono de nuestras venas. Unas venas más verdosas se corresponden a un fenotipo cálido, mientras que unas venas azuladas se relacionan con un fenotipo frío.
¿Te has fijado alguna vez que los tonos de los tintes de cabello se nombran con dos números separados por un punto? El primer número, el que se sitúa antes del punto, corresponde a la escala de color (1 el negro más oscuro, y el 9 el rubio más claro). Los números que van después del punto son los que marcan si los reflejos son cálidos o fríos. Los números 1 (ceniza) y 2 (irisado) corresponden con los reflejos fríos; mientras que los números 3 (dorado), 4 (cobrizo), 5 (caoba) y 6 (rojo) se relacionan con las tonalidades cálidas. Además, es el momento de recordar que un pelo virgen (que nunca ha sido teñido) se aclara como mucho hasta tres tonos de su color natural; es decir, que un pelo negro 9 nunca podrá lucir con un rubio 1 sin decolorarlo y tratarlo previamente.
¿Y qué pasa con tu mirada? Ella también tiene mucho que decir si quieres saber qué color de pelo irá mejor contigo. Los ojos verdes, sobre todo si tienes piel clara, dulcifican el rostro si combinan con un cabello castaño claro o rubio ceniza. Los ojos azules consiguen potenciarse con el rubio oscuro con toques dorados y con el negro más intenso. Sin embargo, el pelo castaño o chocolate combinado con unas mechas californianas sienta de maravilla a los ojos marrones/miel; mientras que el cabello negro o castaño muy intenso es perfecto para los ojos negros y las pieles muy bronceadas.
Además, cada color tiene unas cualidades concretas. El rubio, por ejemplo, suaviza las facciones y rejuvenece; mientras que el castaño oscuro y el negro potencian una imagen mucho más dura y dejan más en evidencia las imperfecciones cutáneas como manchas, cicatrices, ojeras o bolsas de ojos.
Recuerda que éstas son sólo unas pautas que te pueden ayudar a acertar en la elección del color que va más con tu cabello, porque en tu imagen sólo mandáis tú y tu atrevimiento.