¿Pelo graso? La causa de todos tus males es la producción excesiva de grasa capilar, un hecho contra el que a veces no sabemos cómo luchar. Las personas con un cabello de estas características tienen problemas para lucir durante varios días un pelo con brillo y aspecto sano, por eso te damos algunas claves para que siempre estés radiante. El truco está en seguir los cuidados adecuados y dejar atrás los mitos.
¿Es cierto el llamado “efecto rebote”? Este supuesto proceso hace que cuanto más laves tu cabello, más grasa produzca. Todos los especialistas coinciden en desmentir este mito: el pelo graso debe lavarse con la frecuencia necesaria. Eso sí, no utilices champús demasiado agresivos, opta por productos suaves de pH neutro para evitar irritaciones en el cuero cabelludo. Si prefieres espaciar los lavados, escoge un champú especial para cabello graso, que controla la producción de sebo.
Antes de lavar tu pelo, realiza un ligero masaje para activar la microcirculación. Al acabar, acláralo por última vez con agua fría, ¡perfecto para dar brillo y tonificar el cabello! Tras el lavado, sécalo con una toalla para quitar el exceso de agua, y utiliza el secador a temperatura suave y a unos centímetros de distancia de tu pelo. Por último, ¿cómo peinar el cabello graso? Evita los peines de metal de dientes finos y juntos, que ayudan a activar la producción de sebo, y apuesta por dientes redondos y lisos.
Otro aspecto a evitar es el gesto de tocarse el pelo a menudo, que solo agravará el problema, así como utilizar productos de fijación como geles y lacas, que contribuyen a ensuciar el cabello.
Como complemento a estos cuidados capilares, los tratamientos profesionales para pelos grasos, una buena alimentación y hábitos de sueño saludables, te ayudarán a mantener la salud de tu cabello.